
LUCES NOCTURNAS DE LIBERTAD
¡Enséñame a vivir entre las sombras mudas de la noche interna!
Cuando en el atardecer la Naturaleza se despide de tu alma, que tus sueños alcancen el deseo de tu corazón
La noche abrazaba al atardecer mientras el sol susurraba a las estrellas
Tus pasos avanzan hacia las noches mientras tus sueños hacen la realidad de los días
Cuando amanezca de mí muerte, continuaré la realidad de mis sueños
¡Qué bella es tu luz, mujer; esa luz iluminará cada amanecer a tus hijos!
La dulce voz de este amanecer me hace sentir componente de él
Al abrir los ojos vi a mi madre sonriendo con mi despertar, cual rocío despierta con la sutil mirada del sol
Conforme avanzo en mi libertad, la Vida va eligiendo mi camino
Bendito el ser humano que se desarrolla en la ternura y dulzura, haciendo que el Gran Niño crezca con él
Luz no ahuyentes a la oscuridad; ella también nació para ser libre
Me dijeron cuando era niño: “estudia y sé un gran hombre en tu vida”. Estudié … pero fui Hombre cuando encontré la libertad conmigo mismo
Con qué sutileza nace el amor en el despertar de las flores, como en el bello sueño del dormir de las hojas otoñales
La noche escuchaba el oleaje de aquel mar de sombras. Respiré sereno ante la aventura de mi alma nocturna
Lo mismo que los pájaros abren un amanecer luminoso, las nubes otoñales cierran el horizonte de un glorioso atardecer
No soñé con serte útil sino con amarte siempre
ÁNGEL SANZ GOENA
www.colordelalma.com